La ciudad que uno posee,
no es la que otros tienen.
La de uno,
la propia,
tiene los postes de la luz en el lugar equivocado,
se llena de sombras donde no debería haberlas.
En la de uno,
el vendedor de periódicos muestra el Ovaciones volteado,
de manera que se tenga que hacer equilibrio
para poder leer el cabezal de 90 puntos,
y eso a medias.
En la ciudad propia, la tienda de la esquina cierra invariablemente a las 7:15,
aunque cuando uno les pregunta en la mañana a qué hora van a cerrar esa noche,
dicen que a las 8:00;
en la ciudad de uno, el canal 9 se ve con interferencia
a la hora que pasan las películas de Bogart.
Quizá la ciudad personal tiene parentescos con las otras:
la miseria,
el desempleo,
la falta de pudor del poder que miente electrónicamente,
el precio de la gasolina,
la nube negra que viaja de noroeste a suroeste,
el malhumor de los vecinos del 5,
el sabor estándar de las hamburguesas de los Vips,
la reacción instantánea de la mujer de la limpieza
cuando una lámpara se mueve a destiempo
anunciando temblor.
Yobailopogo!
-Carajo, estaba enamorado del DF,
otro amor imposible a la lista,
una ciudad para querer,
para querer locamente,
en arrebatos-
PIT II
-Carajo, estaba enamorado del DF,
otro amor imposible a la lista,
una ciudad para querer,
para querer locamente,
en arrebatos-
PIT II
4 comentarios:
me latieron las palabras, los pensamientos. super chingon.
Yo estoy enamorada de mi ciudad, no la cambio por ninguna otra.
Besos reptilio
que chido eso del canal con interferencia cuando pasan alguna película, por lo general, es cierto
quién sabe porque me acordé de "corazón de neón" de Joaquín Sabina
saludos
Jacinto Pedia: simon, que chido, de las cosas que uno piensa caminando medio flama sin llegar a los pulques hahaha
la MaLquEridA: otro amor imposible a la lista
Gerardo: vivimos en el DF querido
YOBAILOPOGO!
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